El Renault 5 Turbo 2 es uno de esos coches legendarios en cualquier esquina del mundo. Ya sea en España, Estados Unidos o Japón, el “culo gordo” disfruta del prestigio de un buen Homologation Special, siendo una imagen viva de la locura del mundo de los Rally de los ochenta.
La fórmula del R5 Turbo II parecía creada por un equipo de locos que, por alguna razón, estaba a cargo de Renault: Una estética de infarto, un motor turboalimentado en posición central, tracción trasera… Basándose en un pequeño compacto de tracción delantera.
Sin embargo, la unidad de la que hablamos hoy va un pasito más allá. Este R5 fue comprado nuevo (e importado) en California, Estados Unidos, un mercado en el que este modelo nunca estuvo en venta.
Aunque eso ya sea inusual de por sí, no es lo más raro ni de lejos. A esta unidad se le quitó el bloque turboalimentado de 1.4 litros, y fue reemplazado por un motor rotativo, específicamente, un 13B turboalimentado firmado por Mazda, con doble rotor, produciendo alrededor de 300 CV, que puede parecer una cantidad nada exagerada en términos de hoy en día, pero no hay que olvidar que los R5 Turbo II pesaban menos de una tonelada.
La potencia del Mazda 13B, casi el doble de la potencia de serie, se transfiere a las ruedas traseras a través de la caja de cambios manual original de Renault UN1, dando una pequeña idea de la locura que debe de ser estar al volante.
Hablando de interiores, este Renault 5 Turbo 2 está de estricta serie, con los asientos de color beige originales, el volante de Iso-Delta original, y la instrumentación Jaeger tan mítica de la época.
El Renault 5 Turbo 2 no destaca precisamente por tener una apariencia de sleeper. Sus aletas ensanchadas hasta el infinito y sus grandes entradas de aire no dejan presagiar precisamente eso. Pero esta unidad será toda una sorpresa para quien espere solamente los 170 CV que trae de casa.
Esta monstruosidad pronto encontrará un nuevo dueño, puesto que está siendo subastada en Bring a Trailer, a falta de 4 horas de finalizar, por lo que si buscas una experiencia analógica de lo más radical, es mejor que te des prisa.
