Cuando dices que Peugeot tuvo modelos con ciertos aires italianos que pueden asemejarse a algunos modelos fabricados por marcas como Ferrari, la gente que lo desconoce te mirará raro, pero muchos estarán de acuerdo contigo.
Peugeot 504: Pequeña historia del modelo
Cuando el Peugeot 504 se presentó a finales de 1968, fue toda una innovación en su segmento. Su carrocería, esculpida por Pininfarina, dejaba atrás las líneas suaves de su predecesor, el Peugeot 404, propias de los años cincuenta y sesenta, para desarrollar un coche con ángulos bastante más marcados y con carácter.
Tanto las versiones berlina como la familiar no pasaron desapercibidas, pero faltaría la llegada de dos de las variantes que se podrían considerar como dos de los coches más bonitos que han salido de la fábrica de la marca francesa: el 504 Coupé y el descapotable.
Peugeot 504 Targa Caruna: Franco-suizo con acento italiano
Años más tarde, en 1977, un empresario decidió convertir su recién comprado Peugeot 504 V6 Cabriolet en un proyecto literalmente único, de la mano del carrocero suizo Caruna.
El proyecto consistía en crear una versión del Peugeot 504 nunca vista: Una variante Targa. Para crearlo, se construyó una estructura superior totalmente hecha a medida, con dos mitades de techo extraíbles para que se pudiesen llevar en el maletero en caso de querer ir al descubierto.
Para obtener una sensación de descapotable real, también había la posibilidad de quitar la ventana trasera fabricada en PVC, mediante una cremallera. Como última opción, y posiblemente la más impráctica, también disponía de la capota blanda original, modificada para que funcionase a la perfección con la nueva estructura Targa, aunque por desgracia, no hay sitio para guardarla dentro del coche.
Además de esa estructura Targa, lo que más llama la atención de este Peugeot 504 Targa Caruna son los pilotos traseros, provenientes directamente de Ferrari. Si ya el Peugeot 504 disfruta de unas líneas de diseño italianas bastante exóticas, la inclusión de esos pilotos tan característicos de la marca del Cavallino Rampante, hizo que incluso los aficionados más fieles de la marca italiana se confundiesen al verlo.
El coche que confundió a los aficionados de Ferrari
Una de las anécdotas que relata su actual dueño, fue su viaje con el 504 Targa Caruna a Maranello para visitar el Museo Ferrari, en donde sorprendió a todos los presentes, que reconocieron las luces de Ferrari al instante, pero no eran capaces de identificar el modelo, por lo que supusieron que era un prototipo de un Ferrari Dino.
Nada más lejos de la realidad, el coche que veían no era un Ferrari, sino un Peugeot.