Lo que podría ser una recreación de la saga Fast and Furious en sus inicios en carreras callejeras, atracos a camiones y demás negocios de dudoso prestigio, es una realidad en el artículo que vas a leer.
Hace aproximadamente un año y medio, un hombre llamado Cory Taylor, que conducía su furgoneta, fue parado por la Policía de Massachusetts en un control, encontrando más de 60 kg de drogas. Tras descubrirlo, hicieron una operación en su casa, donde encontraron más drogas, armarios llenos de armas ilegales, millones de dólares de su negocio de narcotráfico, y más de 30 coches deportivos, incluyendo iconos como el Toyota Supra, BMW M3 E46 y Lancer Evolution, contados prácticamente a raudales.
De todos esos deportivos, 27 de ellos, salieron a subasta en Stanley J. Paine Auctioneers, una casa de subasta no tan conocida por el gran público, pero que tienen un tesoro para muchos aficionados del motor.
La gran mayoría de estos coches se encuentran en un estado de colección, con poco recorrido en el cuentakilómetros, incluyendo unidades limitadas como un Toyota Supra A80 15th Anniversary con algo menos de 65.000 km.
Además de ese Supra tan exclusivo, encontramos una docena más de Toyota Supra A80, la mayoría Turbo y Manual, que parecen ser la principal preferencia, 5 BMW M3 E46 de diferentes ediciones, un par de Honda S2000, y otro par de Mitsubishi Lancer Evolution.
Parece que Taylor tenía buen gusto para los coches y los trataba como oro en paño. Como se puede ver en las imágenes de la investigación inicial cuando entraron en su edificio, muchos de los coches estaban meticulosamente guardados e incluso tapados en bolsas de plástico.
Si a pesar de estar al otro lado del charco quieres pujar, puedes encontrar el listado de coches aquí